Irremediable destino que atrapa sin soltar.
No hay navajas que puedan cortar la fortaleza de lo ya escrito.
La vida se apaga y los cristales ya no cortan, la piel ya no sangra.
Golpes al aire y gritos sin eco.
Días que corren con la misma velocidad con la que la lluvia cae.
Fotografías empolvadas, recuerdos olvidados.
La mentira crece y nos perdemos en la multitud buscando amor en los brazos equivocados.
Y sin darnos cuenta nos abandonamos a nosotros mismos.
Fotografía por callaveron
He pensado en quemar mi cama pero no tendría dónde dormir.
Que cansancio ser. La vida y yo no nos llevamos bien.