Charlie Kaufman me recuerda a mi padre.
Pensar en él es regresar al verano de 1968.
Donde el cielo se pintó de rojo,
El DF ardía y los estudiantes gritaban.
Hoy 52 años después, la historia se repite,
Pero el DF ya no es el DF,
Y los estudiantes ya no gritan, escriben,
Todos llevamos mascarillas,
Y hasta un dron nos espió por la ventana.
Sonrío irónicamente y prendo el televisor,
Hay una caricatura de rábanos.
Fotografía por ikebanalena
Amante del cuerpo humano.
Curandera del alma.
Tórax abierto.
Huesos de vidrio.
Piel de papel.
Y corazón en forma de caja.
Soy poeta en mis tiempos grises.