¿Qué herramientas utilizaste para crear esta pieza?
Tinta china, tinta india, marcador arquitectónico sobre papel algodón de 160 gr.
¿Cómo fue tu proceso creativo?
Todos mis procesos son lentos, muy lentos. Casi todo lo que hago toma mucho tiempo en sentirse terminado y salir a la luz, específicamente considero mi trabajo en papel como un ejercicio perennemente procesual en el aspecto que va tomando forma tras procesos de otra índole que no es plástica: puede ser resultado de lo experimentado en la danza, alguna frase literaria, el coro de una canción o un relato onírico.
En mi trabajo plástico, lo figurativo surge sorpresivamente tras la atenta observación de lo abstracto. Me gusta esconder personajes y sucesos en las distintas capas del proceso, por eso cada “escena” puede tomar meses o incluso años. Esta tinta la comencé por ahí del 2015 y apenas en 2021 la terminé. Las fechas, si las recuerdo, las pongo al último, cuando no hay nada más que decir en esa superficie, sin importar mucho cuántos años tomó terminarla o en qué año se comenzó exactamente.
“Me gusta esconder personajes y sucesos en las distintas capas del proceso, por eso cada “escena” puede tomar meses o incluso años.”
Cargo un pequeño cuaderno y unas acuarelas de viaje a donde sea que voy, ahí hago apuntes de sensaciones y experiencias a modo de pequeñas abstracciones de color que me remiten a ese punto específico del camino. Algo así como tomar fotos cuando se está medio ciego. Luego se quedan ahí guardadas reposando, como en un álbum de fotos familiares después de un gran viaje. Un día, algo sucede que me regresa a ese momento, entonces busco en esos trozos de proceso y continúo, tal vez un sueño se suma a una caminata, o una canción se une a un cuento y se va formando una historia que con mucha paciencia, se va relatando. Es una pequeña danza en la meditación propia del uso de la tinta sobre papel.
¿Qué sentimientos te llegan cuando miras la pieza terminada?
Me remite olores, sensaciones musicales, una cierta luz de X día o Y año. Me alegra que alguien más descubra la aparición de algún personaje que se asoma entre manchas y trazos, sólo para ellxs.
¿Qué es lo que más te gusta de esta pieza y por qué?
Que es chiquita e intrincada, es discreta pero con mucha información para quién la nota. Me hace sonreír, porque me divierte su movimiento y su sonido. En las capas hay pequeños seres y escenas que se asoman entre la tinta y el fondo del papel, a veces desaparecen y llegan otros nuevos. En el sonido amarillo del bosque, siento que hay un movimiento muy bonito en el caminar de este espíritu viejo y divertido, a veces siento que va silbando o tarareando un canción que viene de muy atrás en su memoria y que todo aquel que la escucha, la conoce.
¿Cuáles fueron tus referencias, influencias o inspiraciones durante tu proceso creativo?
Siento que esta pieza tiene un espíritu muy antiguo, heredado por la cultura profunda del conocimiento y el amor por la naturaleza, de la comprensión del ser uno con ella. Es un poco teatral. También hay humor. Es como la ilustración de un cuento japonés para niños muy viejo. Es un pedazo de papel con una idea muy oriental en el trazo, tiene algo muy propio de la meditación, del budismo zen y de la danza butoh.
“Constantemente me pregunto si es una necedad regresar a un trabajo que comencé años antes, pero la certeza del proceso interminable y del acto de caminar, me responde.”
¿Qué es lo que más disfrutaste del proceso?
La tinta y el papel son agua y madera, juntos también expresan los ciclos de la tierra. Para mí fue muy bonito cómo algo de mi bosque se retrató en este pedacito de papel y cómo se fue revelando con el tiempo muy lentamente, poco a poquito.
¿Qué fue lo que más trabajo te costó y cómo lo resolviste?
Sacar la imagen del álbum de las memorias y estar segura que hay que continuar contando una historia ahí en esa superficie, o hay que dejarla ser, darla por terminada o regresar a esperar otra intervención en otro momento en el 2050. Al final sabía que tenía que seguirla trabajando. Constantemente me pregunto si es una necedad regresar a un trabajo que comencé años antes, pero la certeza del proceso interminable y del acto de caminar, me responde.
¿En dónde te gustaría ver esta pieza exhibida?
En un pequeño altar dedicado a los sonidos sin testigos, bajo un árbol muy grande y viejo en medio del bosque.
Soy Diana, mujer latina, artista transdisciplinar, creadora de apodos profesional y diseñadora de ideas cursilíneas. Danzo con el espíritu de la música todos los días. Fumo mucho.