Para algunas personas los meses pasan volando. Yo era de esos esta cuarentena, hace un mes viví muchas cosas, pero nunca pensé que te irías así de mi vida.

Al principio comprendí todo, y de verdad que había pensado el motivo bastante tiempo atrás, pero nunca creí que fuera tan pronto.

Sí, sé que “seguimos hablando” y en “buenos términos”. Todo esto para que no se nos haga difícil el rompimiento, pero ya no estás, yo tampoco y a veces extraño cuando habitabamos un mismo sentimiento.

Yo entiendo que hay muchas cosas que los hombres hacemos mal, yo creía que no estaba tan mal, a veces trataba de ignorar las cosas más difíciles y de alguna forma esperaba que tú también. Gran error.

Perdón.

Me cuesta mucho terminar de comprender algo en lo que no puedo ser, quiero ser contigo y deconstruir mis raíces, pero cada vez que lo intento me frustra que es todo lo que habito en sociedad. El concepto de amor en sí también también me cuesta.

Y cuando me dicen que no puedo amarte o nunca lo hice, es un golpe fuerte, ¿qué es entonces lo que siento si no es amor?
Estaba seguro que lo hacía.

Yo sigo pensando que no te amo por consumirte de alguna forma, creo que esto fue algo más sincero y profundo, por eso estaba bien siendo “amigos” para verte crecer en lo que eres.

Extraño que me respondas las cosas lindas que te digo, extraño también que tú me ames.
¿Es que tú si me amabas?
¿Es que tú si puedes amar?

Ahora ya no somos sinceros, ¿está mal que te diga que te extraño?, ¿Si tú me extrañas por qué no solo nos comunicamos?, A fin de cuentas estamos bien y podemos abrazarnos mutuamente en tristeza y acompañarnos.

Me cuesta mucho entender esa parte de las relaciones, no comprendo en qué momento se pierde la sensibilidad y la cercania con tu compañer@ que se significaba tanto.

Tampoco entiendo hasta que punto estoy descargando de forma indebida mis emociones en ti o hasta que punto esto te afecta más a ti.

Perdón.

Comprendo lo que tú haces y el porqué, me gustaría poder seguir contigo de alguna forma y apoyarte, ver crecerte como persona y saberte feliz, aunque suene cliché. Lentamente estoy comprendiendo que ya no hay lugar para mí en tu vida, y está bien, no quiero leerme como una víctima en algo en lo que fuí tal vez lo contrario.

Es que no sé cómo fue ahora estamos tan lejos uno del otra y me cuesta comunicarme porque por alguna extraña razón siento que ya no soy de tu agrado y me siento juzgado dos veces.

Tampoco sé cuál es el fin de escribir esto, solamente lo escribo porque tal vez así pueda sentir que algo se cierra y que te estoy comunicando algo que me cuesta trabajo.

Perdón por las cosas que hice y no me dí cuenta en su momento. Te admiro mucho y si en algún momento volvemos a coincidir estaré muy agradecido con mi existencia, aunque lo entenderé si no.

Fotografía por Lorella Furleo Semeraro