Creo en la muerte como salvación, pero también he sido feliz; como cuando presenté “Diarios de Teca” y mis mejores amigos estaban ahí; como cuando se casó mi amigo Mau y llevé a mamá a Cuernavaca, muchos cholulos egresados del Instituto García de Cisneros, nos embriagamos tanto ese día que varios bailamos música ponchis ponchis aunque tuviésemos raíces darks. Fui feliz cuando entré a la universidad con un alto puntaje y mi abuela me abrazó hasta tronarme todos lo huesos de la espalda. Fui feliz la primera vez que besé a Dania en la boca una gélida noche de septiembre. Fui feliz cuando me compraron mi primera consola de video juegos, que fue una famicom y dejé de mendigar con mis amigos para que me dejaran jugar en sus casas. Soy feliz cuando mis perros ladran cuando entro a mi hogar después de extenuantes jornadas de viaje en los que mis pulmones se hartan de respirar tierra de los páramos y desiertos.
Fotografía: John Kilar | Instagram
Fernando Percino es mexicano y nació en algún momento de los años ochenta; además es licenciado en Administración Pública por la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla. Ha publicado cuentos en el suplemento cultural “Catedral” del diario “Síntesis”, la novela “Velvet Cabaret” (2015), el libro de cuentos “Lucina” (2016), el libro de crónicas “Diarios de Teca” (2016)y actualmente escribe el libro de notas “Volk” en ERRR Magazine. Fue miembro del consejo editorial de las revistas: “Chido BUAP” y “Vanguardia: Todas las expresiones”. Ha trabajado como funcionario público en la Administración Pública Estatal y Federal y se desempeñó en diversos puestos, por más de 7 años, en el ramo de las microfinanzas.