Tu rostro en el espejo

Después de mucho tiempo, volvimos al mismo lugar al que vamos cuando nos gusta estar solos. Te tomé una fotografía esa última noche de Marzo, estabas de pie, viéndote al espejo mientras tenías una conversación conmigo y no podía dejar de pensar en tu reflejo a través del espejo.

Al verte, pude notar tus ojos cansados y tristes después de haber pasado tantas noches de insomnio sin tenerme a tu lado, pero tu sonrisa llena de alegría por estar juntos en ese momento, como siempre habíamos querido.

Volteas la mirada y me miras fijamente, y en ella puedo sentir el peso de los años, tus ojos me lo dicen todo; a través de ellos puedo sentir tu vulnerabilidad y lo que escondes. Creamos un silencio, no son necesarias las palabras; podemos vernos a nosotros mismos con cada detalle que captan nuestras pupilas, y sabemos que ese momento no se volverá a repetir hasta que en ellos encontremos la paz.

Fotografía: ding ren