Tú eras la red social que más utilizaba.
Eras lo primero que quería ver al abrir mi celular.
Tú eras todo el contenido que yo quería ver.
Eras desde alegría hasta llanto.

Al pasar el tiempo tu contenido ya no iba dirigido a mí, iba dirigido a otra persona.

Dejaste de ser la red social que más frecuentaba
para simplemente bloquearte y eliminarte de mi vida.