Deja que esté ahí.
En el rincón de tus pensamientos,
escondido en tus sueños;
Acechando ese beso.
Hacerme amigo de tu libertad,
De ti.
En las horas de penumbra,
Caminar contigo a oscuras;
Retar a la razón
Y brindar por nuestra coincidencia.
Disfrutar esté tiempo,
Tan lleno de ti.
De caminatas,
Pláticas interminables;
De ojos cerrados por el sueño.
Deja que me quede,
A un “ladito” tuyo.
De tu sentir,
De tu alma,
De tus dudas y aciertos,
Y besar el suelo donde pisas:
Segura de mí.
Fotografía por Martin Canova
Estudiante de psicología, amante de las letras titulado por el diplomado de Letras en la Escuela de Escritores Mexicanos. 29 años de vida vacía, llena, sin fin y otras veces finita.