Verla es lo que más deseo, poder platicar con ella y ponernos al corriente después de 5 años, abrazarla, hacerla sonreír.
Deseo poder recordarle aquellas tardes en la escuela, acostada en el pasto escuchando a los Smiths, viendo como las ardillas brincaban de un árbol a otro, robándose la comida.

Ver en sus ojos la ilusión de querer cambiar al mundo, hacerla felíz como antes, quiero poder oler su esencia al atardecer y ver cómo se mira miles de veces en el espejo por qué sabe que es bonita.

Quiero hacerle cosquillas hasta que llore, regalarle una hojita donde apunte sus metas de un día en especifico, hacer planes para dentro de 5 y 10 años.

Recordarle que el amor cursi, exagerado y rosa existe, que no tiene nada de malo darlo todo y quedarse con nada al final, que es bueno dar cartas, dedicar canciones, dedicar estrellas, regalar experiencias y hacer un lugar suyo.

Te extraño, pero sabes dónde encontrarme… basta con ver un espejo.

Fotografía por DIADA