Mi existir es todo

Existir, tal vez eso es todo en mi universo, existir en mi y dejar de buscar espacios.
Existir, es todo. Todo es mi cuerpo, mi alma, mi cabeza. Cada cosa que es llamada con vulgaridad por otros, todo es mío y soy feliz de tenerlo, me hacen, me deshacen y me evolucionan hasta el punto en que ya nadie entiende, el punto donde logro desesperar, que me odien, que griten… El punto donde logro que me ignoren y quieran salir corriendo por la puerta. Ese punto.
Qué hermoso.
Qué hermosa soy. Tan capaz de todo, irreverente de todo, libre de nada, pero dueña de todo.

Así es, mujer. Dueña de todo… Por que nadie más gritará tan alto tus defectos como lo que tú sabes y te gritas de día y noche, en sueños, en fantasía, en todo aquello que sabes qué no vendrá pero no dejas de soñarlo y vivirlo contigo. Qué grandioso poder de hechicera.

Hechicera que libera grandes demonios, que exploro la vulnerabilidad de otro, donde creen que me hacen el suficiente daño, pero yo ya lo logré todo, soy hechicera porque se cuando me mienten, se de verdades que son excusas patéticas, se de bajas pasiones y pensamientos liberales.

Lo sé, la experiencia me ha dado mucho. Me a dado todo, el tiempo recién me contó muchas cosas… Soy capaz de todo.
Existir es mi momento. Existir es todo.

Fotografía: Gediminas Jankevicius