Me gusta despertar a tu lado.
Salir al balcón por las mañanas y ver las nubes moverse al compás de los autos en esta ajetreada ciudad.
Me gusta el día con sol y aire fresco, aunque mañana haya contingencia ambiental.
Me gusta –a diferencia de ti- que toda la mañana los pájaros estén “chingando” (cantando).
Me gusta que te pongas hasta la verga y no recuerdes tu desmadre en las fiestas.
Me gusta caminar lento y de tu mano por el mercado de San Juan.
Me gusta que me abraces si te nace.
Y que metas tus dedos a mi boca.
Me gusta que te guste sólo estar por estar con esta loca.
Fotografía por Richard Gaston
Patéticamente Poético