Intimidad

¿Hace cuanto que no sientes así?

Estuvimos coqueteando por días preguntando cosas estúpidas como: “¿Qué zapatos traes hoy?” y otras no tanto “¿Cómo sigue tu abuelo?”
Pocas veces sientes una conexión con una persona que haz visto solo 2 veces y compartido un café.
Había salido ya con otros chicos y era siempre el mismo vacío; No sé que cambió la noche del Viernes, tal vez fueron las 2hrs que pasamos en el tráfico contando historias de nuestra niñez y cosas tontas que hicimos de adolescentes; Puede ser el como me arremedabas cuando hacía ruidos extraños en medio de la conversación (no sabía si me enojaba o me gustaba)?Quizás los puntos de vista diferentes (y necios a pesar de tus 28 años)?O que compraste (sin saber) mi sushi favorito para cenar!
Lo que sé es que todo esta ocasión se sintió diferente, incluso el sexo que por primera vez fue maduro, intenso, íntimo…

Intimidad, (me parece curioso que usen ese termino para referirse al sexo) la verdadera intimidad es más que sexo, trata del hecho de estar completamente desnudos, frágiles, indefensos y aún así puedes seguir charlando sin pena como si se conocieran de mucho tiempo; Que mientras hablas, te mire fijamente y acaricie los huesos de tu cadera y tu pases los dedos por su cabello como desenmarañando la historia; Que al contarte algo vergonzoso sientas como su mano aprieta tu muslo como reflejo de la risa; Que prendan un cigarro y cuenten algo personal mientras están sentados en el borde de la cama y él pasa su dedo por todo el largo de tu espalda y finalmente se levanten, no para vestirse, solo para cambiar la música y seguir platicando de todo y nada.
Fue así que me decidí pasar el fin de semana contigo simplemente porque éstas cosas no suceden siempre, son difíciles de encontrar y aún más difícil conservarlas por lo que cada palabra, movimiento y toque deben ser aprovechados con todos los sentidos a flor de piel.

Al final no sé si volverá a suceder,
¿Lecciones de vida?
¿Destino?
¿Amor?

Yo solo sé que las conexiones así pasan rara vez en la vida,  que aunque quedamos para vernos otra vez nada está escrito, podemos cambiar, intentar que se repita y no sea igual, como sea…
Estoy en casa, ya hablamos para saber que llegué bien y que tu departamento está lleno de amigos de nuevo…
Lo que no te dije y escribo aquí es:
Gracias por las cenas, las charlas, el sexo… por la intimidad.

Fotografía: Valentina Varas