HOY YA NO ES MAÑANA

Los tiempos muertos, los no muertos. 

Que siguen y siguen; van a prisa, no se detienen y circulan sin respiro por seguir el ritmo. 

Pausa; golpe abrupto. 

Me detengo, me agoto, no puedo y sin poder sigo, sigo y así los 360º del reloj. 

Tan relativo y lineal el tiempo. 

Así los contrastes del universo… blanco y negro. 

Ni uno, ni dos, ni tres… hay mil o más de mil. 

Y con equilibrio cualquier número está bien. 

Pensar tanto hace daño y no hacerlo también. 

Entre la saturación y el abrumo, viene la desesperación.

Estallido de pensamientos ahogados en ansiedad, saliendo a flote después de soltar todo y quedando con la ligereza suficiente para seguir. 

Las preguntas constantes, sin respuesta exacta. 

Confiando solo en el instinto con las dudas adjuntas para dejarse llevar y no ahogarse demás. 

Solo seguir.

No saber el sentido propio y mucho menos de la vida. 

Derrochar amor, porque la vida misma nos llena de amor, cuando se abraza, cuando se comparte, CUANDO SE ES. 

Dudar de todo y estar estúpidamente segura de lo que hay.  

Si me dieran como opción saber el futuro, igual me negaría a saberlo.

LA VIDA ES SABIA y siempre sabe cuando arrojar el primer rayo del sol a la hora exacta. 

Aprovechando cada segundo de la asfixiante vida y su sistema actual.

Entender que la vida pasa. 

TODO NACE Y TODO MUERE AL MISMO TIEMPO…Y HOY YA NO ES MAÑANA. 

Fotografías por Daniel Araujo aka tigrefacil