Cualquier día después de medianoche

La sombra de mi cabeza

se refleja en su estómago

contra la luz azulada.

Soy tan pequeña.

Él va por una birra

y yo me quedo bailando sola.

Alguien viene a mí

me saluda

me felicita por lo de la tesis

me da un trago

de su propia cerveza

yo me pongo incómoda

y sigo bailando.

Un mae pasa detrás mío

me toca las nalgas

no sé si fue a propósito

o no

entonces cierro los ojos

y sigo bailando.

Él regresa

bailamos muy pegados

yo siento su erección

casi a la altura de mi ombligo.

Soy tan pequeña.

Nos besamos

él se inclina un poco

porque no puedo ponerme de puntillas.

Nos besamos

y es un pacto

para no dormir solos esta noche.

Nos besamos

como una forma de no vomitar

de no hablar

de no llorar.

Terminamos

él me besa la frente

y me chupa la cabeza

siento un escalofrío

me da asco

después risa.

Él me dice

qué pequeña que es.

Nos reímos

cierro los ojos de nuevo

y seguimos bailando.

Fotografía: Tiago Almança