Callistemon

Gracias por dejarme probar del Edén de tus labios. Tus besos me llevan al cielo y me transportan a todos lados.
Floreces como las jacarandas y dejas caer tus florecitas en el jardín de mi ser.
Eres todo y lo único que me gusta ver.
Contigo la vida ya no me debe nada.
Hacerte cosquillas es lo más bonito y placentero para mi alma.
Amo el encantador sonido de tu risa. Amo tus lunares en los que quisiera vivir, amo tus facciones, amo cómo me coges, amo tu mente tan rara y tan hermosa como Callistemon, amo tu cuerpo celeste y caliente que pareció estar hecho para el mío, tan frío. Amo tu ser  inverosímil que me nutre y florece el alma.
No te vayas nunca lindo chico, que me matarías ya toda la esperanza, y de mi sólo quedaría un miserable fantasma.

Fotografía: Massimo Nolletti