¿Cuál es tu palabra favorita?
Salpicón.
¿Qué soñaste anoche?
Soñé que mi mamá dibujaba una espiral negra en un cuaderno. La espiral vibraba y giraba, era como un gif que se movía lentamente. La espiral terminaba convirtiéndose en un agujero en la hoja de papel. Yo no quería ver a mi mamá a los ojos.
¿Cuál es la película que más te ha hecho reír?
Seguro una de Jim Carrey. Muy probablemente “Liar, Liar”.
¿Qué canción te gustaría que pusieran en tu funeral?
Esto lo he pensado varias veces. Debería ser la versión coral de “Sanpo”, la marcha con la que inicia “Tonari no Totoro” (“Mi amigo Totoro”). En inglés la traducen como “Hey, let’s go!”. Me parece una forma muy adecuada de iniciar el viaje a lo que sea que sigue.
¿Cuál es tu definición de «arte»?
Tengo una mala conexión con las artes pictóricas, así es que para mí el arte se asocia con los artificios que me han hecho sentir más belleza en la vida: las letras, el cine, los juegos interactivos, los cómics. Arte es ese lugar seguro para mí.
¿Cuál sería tu proyecto o colaboración ideal?
Ayudar a Guillermo del Toro a escribir un guión. Alguien con una imaginación tan brutal necesita un poco de asistencia en el departamento narrativo.
¿Cuál es el mejor consejo que alguien te ha dado?
“Un hombre no debe estar solo”. Yo sé que suena mal en esta época del #MeToo y los pañuelos verdes, pero en realidad lo traduzco como “una persona no debe estar sola”. Cuando me dieron ese consejo yo me estaba azotando por una relación fallida, y de alguna manera me ayudó a relajarme y buscar salidas. Y sobre todo, a buscar cómo no estar solo. Han pasado los años y creo que nadie debe estar solo. Eso de es que “no sabes estar solo” es un mito, nadie quiere estar solo. Supongo que ese consejo puso una idea que germinó con el tiempo.
Si pudieras cambiar algo del mundo, ¿qué cambiarías?
Muchas cosas del mundo me cagan y me han cagado a lo largo de los años, pero así es el juego. Si llegara el genio de la lámpara maravillosa y me hiciera esta pregunta, creo que terminaría diciéndole “no le cambies nada wey, déjalo así como está. El mundo es lo que es. Así es el juego”.
Un pingüino entra a tu cuarto con un sombrero puesto. ¿Qué es lo primero que te dice y por qué está en tu cuarto?
No dice nada. Se queda callado. Pero yo sé que quiere dinero.
Fotografía por Eduardo Pedro Oliveira
Escribo libros, hago un podcast semanal de cultura pop, tengo mi propio negocio e intento ayudarle a mi hija adolescente a encontrar su camino :)