La puerta de la habitaciĆ³n 226 del hotel Savoy en Londres se abre lentamente, en ella entra el joven Stanley Paul Vogel.
Ingresa lidiando torpemente con un traje reciƩn sacado de la tintoreria embolsado sobre los hombros, dos carpetas llenas de fotos y un bolso de mano con una camara dentro, tratando de no dejar caer nada y fallando en el intento, sus carpetas caen al suelo y las fotos quedan desparramadas. Demasiado cansado como para levantarlas tira el resto de las cosas sobre la cama y se recuesta en ella, decide levantarse y tomar una foto desde la ventana, al acercarse a la ventana comienza a planear la foto durante un breve periodo de tiempo. agarra la camara y listo, el momento se congelo, una imagen mas entre todas las que estarƭan en alguna carpeta de su modesta oficina en Nueva York.
El telefono suena, llaman de la recepciĆ³n para avisar que su madre llama desde Estados Unidos. Stanley acepta la llamada.
S-Hola?
M-Hola hijo, te llamo por que ya no me llamas nunca.
-Lo siento MamĆ”, estuve muy ocupado, no he tenido tiempo.
cuanto tiempo necesita un hijo para hablar con su madre? Te extraƱo, como te va en Londres? conseguiste el puesto?
-No es eso, solo estoy tratando de que publiquen mis trabajos mas artisticos.
Vanity fair es una gran revista, no entiendo por que no quieres seguir ahĆ­. No quiero que vuelvas a tener problemas de dinero como durante toda tu adolescencia, tu padre y yo ya tenemos suficiente con tu hermano menor que aquĆ­ entre nosotros, nunca tuvo ningĆŗn don aparente mas que el de provocarnos problemas.
-Es Vanity Fair mamĆ”, no National Geographic. Y Ralph es un buen chico, solo hay que darle tiempo, no es facil construir una vida funcional desde el punto de vista capitalista y acotado con el que vivimos y nos criaron.
No es gracioso Stan, ademas tu vida tampoco es ejemplar, que sucediĆ³ con esa hermosa chica? como se llamaba? Kelly? Shelly?
-Melissa, su nombre es Melissa, no funcionĆ³. Y ya te dije que no me llames Stan.
Oh, lo lamento, pero tienes que seguir adelante. Esos nietos no vendran solos ha!
Por que no puedo llamarte Stan? es el nombre que tu padre y yo te pusimos, solƭa encantarte cuando eras pequeƱo.
-Tengo 26 aƱos MamĆ”, solo no me parece un nombre para un adulto, eso es todo. MamĆ”, estas llamadas son caras…yo…me alegro que PapĆ” y tu estĆ©n bien.
Paul, me siento extraƱa al llamarte asƭ, siempre has sido mi Stan, mi pequeƱo Stan que ahora es un hombre.
Estoy orgullosa de ti hijo, no lo olvides y tu padre y yo solo queremos lo mejor para ti. Te amo.
-Lo se, adiĆ³s MamĆ”.
AdiĆ³s.

Son las 14 hs. Paul pide servicio a la habitaciĆ³n para almorzar, su madre no lo sabia pero el habĆ­a renunciado a su puesto como fotografo para Vanity Fair, el dinero de su liquidacion estaba puesto en poder lograr que alguna editorial publique las fotos que siempre quiso hacer o conseguir un puesto en una revista mas “seria”.
Debido a eso, luego que el mesero se retirara Paul dijo en voz alta y sin contemplaciones particulares “me cago en la mierda, siempre eres igual de idiota Paul.”
Mientras comƭa su hamburguesa con papas el telefono suena nuevamente, esta vez era su mejor amigo, su colombroƱo por asi decirlo, Paulie.
Paul-Hola imbƩcil.
Paulie-Hola cara de pito.
Paul-Te extraƱo de una manera unica y exclusivamente gay.
Paulie-Y que otra manera conoces? hahaha
Paul-Vete a la mierda Paulie
Paulie- hahaha Como va todo en Londres?
Paul-No muy bien, me rechazaron dos editoriales en un dƭa y el dinero y la paciencia se me estƔn agotando.
Paulie-No esta bien, cuanto dinero necesitas?
1-Paulie, no quiero tu dinero, recuerdas cuando tuve mi primera cita con Melissa?
2-Ah si, lo recuerdo, fue en el 69, eramos unos niƱos, nunca me devolviste ese dinero haha
1-A veces pienso en ella, tambiƩn pensƩ en llamarla, tengo su numero desde la ultima vez que la vi en aquella conferencia en Denver.
2-Amigo, debes olvidarte de eso, pasaron que? tres aƱos? estoy seguro que tu fealdad no te impedirƔ anotar algunos touchdowns de vuelta en tu adorada Nueva York.
1-Nunca me dijo que se habĆ­a acabado y desde entonces tengo esta sensaciĆ³n que se queda conmigo desde que despierto hasta que voy a dormir, ella solamente se fue.
2-Esa es la unica respuesta que necesitas, puedo asegurarte que las cosas van a ser mejores una vez que pongas tu cabeza y tu corazĆ³n en otra parte.
1-Lo se Paulie, lo se…
(hubo un breve silencio incomodo)
1-Hey, como estƔn Annie y los niƱos?
2-Quejumbrosos y sin pompa y circunstancia pero los amo de todas maneras.
1-Sospecho que tu querida esposa posee un enorme don para la paciencia con el que tu no has sido bendecido.
2-Tu sospecha es casi una certeza, eso es todo lo que voy a decirte.
1-La defensa descansa.
1-Hey esto debe ser caro.
2-Si, deberĆ­a irme.
2-No te rindas amigo, aguanta ahĆ­, solo unos dĆ­as mas, alguien va a notarte.
1-Eso espero Paulie, eso espero.
1-AdiĆ³s.
2-AdiĆ³s amigo.

El resto del dĆ­a Paul estuvo en el bar del hotel bebiendo gaseosas, leyendo y ocasionalmente viendo televisiĆ³n porque no querĆ­a emborracharse solo lejos de casa, a pesar que sentia que era una forma de precaucion algo cobarde, no habĆ­a nadie cerca para advertirselo. Agarro una servilleta de papel y con una lapicera escribiĆ³ en ella “No hay dolor en estar lejos de casa y no ser cuestionado por nada en absoluto.”
DecidiĆ³ hacer una caminata por los alrededores del hotel, se detuvo a comprar algunas chucherias en una tienda de antiguedades, al regresar a su habitaciĆ³n se dijo a si mismo en voz alta, “Voy a terminar con esto antes de la cena” y agarro el telefono y marco el numero de Melissa.
Melissa-Hola?
Paul-…
M-Hay alguien ahĆ­?
P-Si! hola, perdĆ³n, soy yo, Paul, Paul Vogel.
M-Paul! hola! no pensƩ que llamarƭas, ha pasado un tiempo. Como estas? Donde has estado?
P-En muchos lugares diferentes en los ultimos dos aƱos, no lo imaginarias.
M-Y donde estas ahora?
P-Londres, tratando de sacar a flote mi carrera o morir en el intento.
M-Y que paso con Vanity Fair?
P-Ya no me interesa tomarle fotos a esa gentuza de Hollywood.
M-haha “gentuza”, a juzgar por tus palabras me alegra saber que sigues siendo tu Paul, el Paul que conoci.
P-De eso queria hablar…
(Melissa lo interrumpe y cambia su tono de voz por uno mas agudo y levemente agresivo)
M-Paul, ya han pasado tres aƱos. por dios, estoy casada.
P-Lo se, pero…
M-Estoy embarazada.
(Paul comienza a llorar)
M-Lo siento Paul.
P-Podriamos haber seguido intentandolo Melissa, solamente te fuiste y me llamaste cinco dias despuƩs para decirme que estabas en lo de tu madre y que no podƭa verte. como se supone que tengo que sentirme? deberƭas decirmelo porque ya no lo se realmente.
M-Habiamos perdido a nuestra bebe, como crees que yo me sentƭa? Paul, tenia miedo, ya no podƭa seguir, trate de suicidarme, te estaba haciendo daƱo, ya no podƭa quedarme. ni por mi ni por ti, por que no lo entiendes?
P-Porque todavĆ­a duele, todos los dĆ­as.
M-De verdad lo siento Paul.
(un silencio breve pero reparador se apodero de ambos, Paul trato de componerse para luego seguir hablando con su voz semi quebrada)
P-Yo tambiƩn lo siento, no deberƭa haber actuado asƭ durante estos aƱos, deberƭa haber sido mas comprensivo.
El dolor que siento, yo entre en panico y desde entonces no supe que hacer con el.
M-Si de algo te sirve, no habƭa nada malo contigo, te amaba, estƔbamos construyendo una familia juntos. Todo salio mal, no es culpa de nadie, pero es hora de dejarlo ir, por nosotros y por nuestra bebe.
Debo irme, cuidate Paul, solo trata de mejorar, te lo mereces.
P-AdiĆ³s Melissa. felicitaciones por el bebe, te lo mereces mas que nadie.
M-Lo se Paul, lo se. AdiĆ³s.

La maƱana siguiente Paul recibiĆ³ una llamada, era de una editorial, habĆ­an visto sus fotos y estaban interesados en trabajar con el.
Se dirigiĆ³ de inmediato a la entrada del hotel para tomar un taxi mientras se colocaba su abrigo, era el 17 de Agosto de 1973 y en la radio del taxi sonaba “and it stoned me” de Van Morrison. Y Paul Vogel, finalmente era un hombre libre de dolor.

FotografĆ­a por Jocelyn Catterson