En días como hoy quisiera volver.
Las veces que dije que no, las pocas que sí.
Me enferma saber que hubo un “tiempo mejor”,
pero ese es el problema del pasado.
No existe forma de saber que eres feliz en el presente,
solamente en el rabillo de tus ojos nostálgicos.
Pierdo mi vida sentado frente a pixeles,
pagando deudas por el capricho de una familia feliz.
Ni siquiera eso se pudo cumplir.
¿Por qué me esfuerzo en regresar?
En contestar,
en decir,
en amar bien.
En días como hoy quisiera volver.
Por puro capricho, por pura desdicha.
Por la puta gana de sentir que el mundo no estaba tan enfermo.
Porque al final,
nadie se quiere postrar y que la cama pese más de lo normal.
Y aunque en días como hoy quiera volver,
siempre habrá un mañana que querrá ser recordado.
Fotografía por Stanley Bloom
Las personas siempre aplauden por las razones incorrectas