Las rodajas de Naranja lucen perfectas.
Tengo un ligero obsesivo con el orden.
Y en cada trago que ella da, desacomoda mi calma.
Me siento cómodo aquí.
El sorbo en su punto.
Música de fondo se escabulle en los ladrillos y entre los murmullos no dejo de verla.
Luz tenue y miradas coquetas.
“¿Qué espera este tonto?”
Eso debiste pensar cuando los nervios me acecharon y tardaba en mirarte a los ojos.
De verdad yo no sabía. Que esa noche me besarías.
Fue un gusto pasar la noche así: solo en la barra del bar, pensando en escenarios imaginarios sin ti.
Fotografía por Patricia Ruiz del Portal
Fotografía neófita, intento fallido de Artista Plástico y un espacio vacío para llenar de malas decisiones.