Ven, di que a mi me buscabas, alimenta mi alma cansada que ella sabía que por ahí estabas.
Me conformo con un par de horas robadas, algunos tragos y profundas miradas.
Has caso omiso a tu instinto, dejémonos llevar y hagamos algo distinto.
Trae contigo tus más lúgubres fantasías, hagamos que ambos podamos cumplirlas.
Permite que recorra tu cuerpo entero y prívame del aliento hasta sentir que muero.
Fusionemos nuestros cuerpos y viajemos, que el único guía sea el deseo y terminemos.
Al final tomemos nuestras cosas y marchemos, recuérdame a mi en tus frías noches que volveremos a vernos y ambos lo sabemos.