¿Cómo nació este local y qué lo hizo diferente desde el principio?
El proyecto de Liminal nació del propósito de convertirse en espacio de transición entre una barra de café, cocina y una librería. A lo largo del recorrido del proyecto, se han sumado otras formas de la cultura como la exposición de obras de artistas locales, clubes de cine y de lectura. La diferencia de Liminal podría estar en su apuesta gastronómica: incorporar ingredientes locales y norestenses con el café y ofrecer un espacio de hospitalidad a la comunidad. Quizá otra cosa que pudiera diferenciar al espacio, es que nos instalamos en una casa antigua del centro de Monterrey. Estamos ubicados en la zona de Barrio Antiguo. Esto implica respetar los materiales con los que se construían casas y edificios, de modo que a Liminal lo reconocen los clientes por habitar entre el sillar y arquitectura norestense.

¿Qué parte del día, del espacio o del proceso creativo disfrutan más quienes trabajan aquí?
Las personas que trabajamos en Liminal, disfrutamos en la creación de bebidas y mocktails; cuando colaboramos con artistas para las muestras de obra; con los ciclos de cine y estrenos de películas o cortometrajes.
Si alguien entra por primera vez, ¿qué es lo que no debería perderse?
No deberían perderse las especialidades del menú: un mocha o chocolate endulzado con el jarabe de chile ancho. Tampoco podrían perderse las bebidas de cada temporada y los chilaquiles almendrados.

¿Cuál ha sido un desafío interesante que los haya hecho replantearse algo sobre el proyecto?
El desafío de cuidar la coexistencia de los espacios liminales: la librería, la cocina y la barra de café. Nos replanteamos este año hacer remodelaciones al espacio y también comenzaremos el proyecto de tostar nuestro café.
¿Qué influencia, idea o referencia sigue guiando lo que hacen hoy?
La idea de ofrecer un espacio hospitalario a la comunidad.

¿Qué lugar, proyecto o persona los ha inspirado últimamente y por qué?
Nos han inspirado proyectos como Bruma, una librería de Monterrey que busca el criterio y reflexión sobre temas sociales; cafeterías y casas tostadoras como Sonata y Memorias de un barista, por mencionar algunos proyectos con a quienes recientemente hemos visitado y aprendido.
Si su espacio pudiera invitar a alguien a colaborar por un día, ¿quién sería y qué harían juntos?
Invitaríamos a colaborar a Blasto, un artista local. Nos gusta mucho las intervenciones que hace de los espacios físicos urbanos. Lo invitaríamos a intervenir nuestro espacio.

¿Hay algún objeto, rincón o detalle del lugar que tenga una historia que pocos conocen?
El espejo en donde los artistas hacen obras in situ y son irrepetibles y temporales. La intención al principio sólo fue una idea para engrandecer el espacio de forma visual, pero terminó siendo un lienzo para muchos artistas.

Barra de café y espacio para compartir ideas.
Juan Ignacio Ramón 904, Centro
Monterrey, Nuevo León, México
