Por aquí pasan hombres. Van y vienen completos desconocidos; alguno buenos y otros no tan buenos. Al final, permanezco cierto tiempo vagando por un jardín que parace ir construyéndose con caminos sin salida, enredaderas y algunas rosas por aquí y por allá. Cuando se ha construido un jardín durante más de un año, no puedo evitar voltear a ver \”la obra\” que he creado conjuntamente con un desconocido, y entonces, ramas secas y penumbra se esbozan sobre mi y sobre mi espíritu ya muerto. He vuelto a fallar.
Fotografía por Denis Ryabov
Escritora del humo.
Fiel seguidora de Charles Bukowski.