Caer en el abismo de los recuerdos, sentirse insignificante, sentir que el amor lo es todo y no poder dejarte de palabras, de momentos, de canciones que alguna vez cantaron juntos, de calles por las que solían caminar. No poder soltar, no querer soltar, sentir que ahora todo lo que eras ya se ha ido, sentir que te patearon todos los órganos, sentirse roto, sentirse jodido, reír, llorar, dormir, no dormir, olvidar.
Fotografía por Magnus Jorgensen
La curiosidad mató al gato.