Déjame esconderme en tu piel.
Afuera hace calor pero es invierno en todos los lugares en donde no estás conmigo.

Gritar fuerte.
Vernos bien. Parar el tiempo.

Emociones, sensaciones y palabras que me remiten a ti. A lo que eramos.

Los viernes en la noche y los domingos en la mañana que me sabían a verdad.

Entre gritos y reclamos de enojo es imposible escuchar lo que en juicio se siente.

Pensé que teníamos lo que queríamos.

No te conozco. Ni a ti ni a mi ni a la vida.
Ya no.

Las cadenas se deshacen y se transparentan las heridas.

Aceptaría toda la culpa.
Una y otra y otra vez.

Me mataría una y mil veces, al igual que volverme loca por salvar lo que tu ya has sentenciado como perdido.

Fotografía por dirtyharrry