A veces pasa que nos topamos con personas a las que no les interesamos ni una mierda y están con nosotros porque se sienten solos.
Seguramente estás leyendo esto mientras recuerdas a alguna persona en tu pasado que te hizo creer que te habías sacado la lotería… y de repente te hizo querer morir.
Mi propósito aquí no es ponerle más sal a la herida ni nada por el estilo; Más bien quiero que sepas lo siguiente:
No podemos cambiar el pasado, si alguien te hizo mierda más vale que lo superes -no necesariamente que le perdones-, y seguir con tu vida.
Seguramente esa persona no piensa más en eso, quizás ni sepa que te causó tanto daño como para que sigas yendo a terapia o sigas llorando por él/ella en las pedas hoy día.
Y no te sientas mal solo porque alguien te hizo sufrir, nos pasa a todos alguna vez.
No porque estemos pendejos, sino que a veces queremos más que otras veces, bajamos la guardia y cuando menos lo pensamos estamos en algún lugar llorando porque nos vieron la cara de estúpidos.
Seguramente esas personas no cambiarán nunca y está bien, esa mierda pasa todo el tiempo, lo he visto pasar muchas veces, me ha pasado.
Tal vez todos deberíamos acostumbrarnos a las personas que nos lastiman, así cuando se pasen de pendejos con nosotros una vez más no nos sentiremos mal ,porque sabremos que así es fulanito o fulanita. Y diremos: -«Bueno, así es, una vez más me la volvió a aplicar»-.
O tal vez no deberíamos de acostumbrarnos a esa basura y pasar de largo inmediatamente. Pero las cosas no son tan fáciles siempre, pasa que somos muy tercos.
Mi intención no es guiarte, nunca fui buena guía, ni ejemplo, ni nada que se le parezca.
No pretendo cambiarte la vida, solo estoy aburrida escuchando a los Current boys un viernes de cuarentena por la noche mientras espero a que llegue mi six de chelas que pedí en una app.
Fotografía por Camerafilmlens
