No me gusta esta rabia dentro de mí, que se acumula y se filtra a través de mi piel, siempre buscando una salida. Lava ardiente buscando grietas, algo para quemar, destruir, angustiar.
Odio la forma en que arde dentro de mí y se traga partes de mi carne que todavía encuentro buenas, y estoy determinada a comenzar la destrucción sobre todo lo que me debería importar.
¿No tengo control sobre eso? ¿Siempre tengo que vivir con arrepentimiento acurrucado en mi pecho? ¿Por qué lo hago sonar como si un monstruo vive dentro de mí y tomó el control, cuando tal vez soy el monstruo?
Quizás soy un monstruo.
Tal vez soy un monstruo con miedo a su propio fuego.
Fotografía: ding ren