Es que fue tan fugaz,
te vi a los ojos y no eras lo que estoy viendo ahora.
Quizá todo fue una obra astral,
un momento indicado en un preciso lugar,
los segundos perfectos de una alineación universal
o un extraño movimiento que no se repetirá jamás.
Porque lo que pasó esa noche no fue contigo,
fue con alguien más…
Fotografía: Kevin James Neal
