Él
El mundo le daba igual… hasta cierto punto. Lo único que le reconfortaba (mientras todos éramos testigos de nuestra propia decadencia) era el hecho de que esto solo debía precipitar a un fin. Y entre antes mejor.
Ella
Hoy la tierra se veía fértil y las cabezas dóciles, los lobos al fin frustrados de su fuerza, regresan a sus tinieblas.
La tierra fértil y ella fuerte.
(Su mirada hoy pudo observar la línea entre el sol y la tierra cuando estas despiertan)
[la consciencia]
Él
Que podía decir sin que no lo supiera ya. –eso pensaba-. En su silencio radica la historia y solo ahí podía encontrar una explicación.
(en su silencio radica la explicación y solo ahí podía encontrar una historia)
Ella
La medida de todas sus cosas.
Él
El padre sin hijos
Ella
La esposa perfecta. La novia viuda. El verbo.
Él
La mujer que reivindica a la mujer.
Ella
La angustia de la tormenta que se anuncia y nunca llega.
Que clima.
Él
Tardes largas tardes rojas oscuras noche sorda noche muda inquieta lagrimas que no existen.
Ella
No se que pretendía, o si pretendía algo siquiera.
No se que esperaba al estirar su pierna y contraer sus muslos de tal forma que el contorno de su culo y su carnosidad lucieran… de maravilla. O que al girar un poco su cadera y apretar un poco sus generosos bustos tuviera algún fin. Sin embrago debo aceptar que lo mas convincente era su mirada juguetona. (Misma que robe y sigo aprisionando) En fin, no supe que pretendía sacar con todo ese “teatro”.
A los dos días la invite a salir.
Al día siguiente la historia comenzó,
y vaya manera de iniciar ¿eh?
[La devoradora]
Él
D. era de esas personas que podía reflexionar sobre la estructura lógica de lo que no se puede decir, o hablar de la multiplicidad de hechos en el inconsciente
y leer un libro sobre algún músico clásico, mientras escribía un artículo sobre el porno como una forma de estética tergiversada de la belleza, o bien, podía pasar meses sin tocar un libro ni decir nada inteligente.
Ella
Sus trasfondos anarquistas me parecían de naturaleza sabia.
Se salía (L-I-G-E-R-A-M-E-N-T-E) de control.
Él
No la toquen que esta chida.
Ella
Es verdad que nunca nos imaginamos como acabaría esto.
Pero, el pobre se aferra aun a la miseria en que dejó todo.
No podría decirte que me enfurecía mas, si su mediocridad o la mía. Él
-¿Que quieres que te diga? Se empeña en que su historia solo se puede deconstruir.-
Ella
-Que fuerte-
Él
Es verdad que la mayor parte del tiempo no lo entiendo, especialmente por que apenas conoce a Derrida y la deconstruccion le gusta como suena.
Ella
Al fin me libero, me encuentro y recupero mi confianza, mi sexo que él me arrebato como un tirano.
Agotamos la violencia, nos excitamos en ella. Parecer un par de almas muertas fue el único balance que él pudo ingeniar para controlar nuestro caos.
Nos conformamos con formas desviadas y enfermizas de tolerar nuestro impulso.
Deseo que algún día su alma encuentre paz, sinceramente.
Él
-Alguna vez viste como se escuchan esos tonos. Si, ¿viste?… Te llevan a una dulce melancolía, no pesaba, no pesaba nada, pero podías contemplar por un momento cierto estado de desdicha. ¡Bravo!-
Ella
¿Quién de todos ustedes ineptos se atreve a no permitirnos hacer?
Él
Si, ella. Te puede poner pálido si se lo propone.
Ella
-Tu nombre y el nombre de tu jefe-
Él
Nadie podía quitarle la vista de encima lo cual complicaba mi pobre estabilidad emocional y mis
paranoias.
Ella
-Por favor caballeros-, se levanto ella cubierta de pieles que apenas tapaban su sexo, sus curvas resaltaban en su propio sudor, la atmósfera jadeante calentaba esa habitación. A sus pies un grupo de hombres semidesnudos, extasiados con su presencia. Él la había llevado hasta ahí, la coloco en ese nicho para después hundirse por debajo de los otros.
-¿A quién de ustedes hombres, la idea de morir por amor o vivir con el corazón muerto les excita?, hipócritas moralizadores; románticos aficionados. ¿Alguno de ustedes dispuesto a vivir bajo la sombra de un príncipe oscuro?, loco pero vivo. Vivo y feroz.
Él
No volví a encontrar un amor así. Con ella me despedí también del
amor, su mito y su concepto. para siempre.
Ella
Considera el trabajo como herramienta de control de masas con un fin aparentemente único y justo, sin embargo impuesto.
Él
“Más vale morir por pasión que vivir sin Ella”
Ella
-¿Qué hacer para hacer reír a una mujer un domingo por la tarde?-
Él
-Contarle un chiste el viernes-
Ella
Es como si con su cálido abrazo me atrapara y ahí dispuesto él, dispuesta yo, en su voluntad me dejara caer a su lado. Paso tiempo, mucho tiempo, muchas cosas, mucho amor, y discordia, no pude mas aferrarme a su caída, tuve que escapar.
Él
Y mientras yo caigo puedo ver al fin sus alas de fuego que sin querer sin querer sujetaba.
Ella
Pierdes tu tiempo.
Él
Es una medida subjetiva de fácil acceso.
Recuerdo que por momentos éramos padres; y que buenos éramos, tú, el objeto de deseo, yo, el elemento de coerción.
Regreso constantemente a esos recuerdos sin motivo en particular.
Ella
Y ella…
Sus cuerpos pálidos a la luz de la Luna, sujetados como uno solo; la espuma de las olas rozaba sus piernas como queriendo fecundar.
Las estrellas reflejadas sobre el mar hacía traspasar sus almas al infinito.
La luna con su mirada los protegió conmovida por su ingenuo querer.
Pero el sol llego con su fuerza revelando lo que en la sombra de la noche se ocultaba.
[Venus]
Él
-¿Terminaste?-
Ella
-“Cascara de plátano, mostaza orégano, hierbabuena, oh madre, oh-oh…”-
Él
Motivos menores. Verborrea. Papeleo. Puñeta mental. Fobia al silencio. Conversaciones que no llegan a ni un sitio. Puñeta mental dos. Castigo-culpa. Puñeta mental tres. Y yo soy el sinsentido…bah.
Ella
Es curioso que hoy a mediodía sienta el frío de la noche la angustia de la madrugada y el acoso de la incertidumbre.
Él
Ven conmigo a la tierra de mis muertos. Y de su ceniza construir lo que perdimos.
Ella
Visita por momentos el mundo de los vivos, les llena la cabeza de figuraciones que consideran suyas. Después desaparece de nuevo en sus entrañas.
Se que cuando vuelva a despertar vendrá aquí, y con fuerza como me gusta, me sujetara en sus brazos.
Él
Despierta antes que todos, Ella estará un paso siempre delante de ti. Te vio mientras dormías, desnudo tu alma y violo tus pensamientos. Te acecha como gata y tu verla no puedes. Sus pensamientos son tan ágiles como sus palabras. Ella
Hombre, ¿por qué estás tan triste?
Ella
Soledad abrigo infalible, esta noche me fue imposible escapar de ti.
Pero ya que estamos las dos aquí, siéntate ponte cómoda, ya conoces este lugar.
Él
-“Digole la modesta verdad, si el hombre, ese mundillo de locos, suele tenerse por un todo…., yo soy una parte de la parte que en un principio lo era todo, una parte de la tiniebla que parió la luz”-.
[ M E F I S T Ó F E L E S ]
Ella
… Los fortissimi apagaban los pianissimi con una dramatica falta de conexión y un osado scherzi.
Él
“la sensación instantánea del mal absoluto” … (o flatulencia con evacuación).
Ella
Hoy desperté alarmado por un sueño.
Era ella.
Era ella deseando unas manos que no eran mías.
-Su piel viva como el de una enamorada en los albores de los cuerpos que apenas se conocen.
Jóvenes abriles para ella, pastorelas pornograficas para mi; y para él, la sonrisa y la mirada.
Convirtió amigos en enemigos por justicia y cuenta.
Convertí los amores en tormentos por placer.
Cada quien toma la manzana que le corresponde, pero el paraíso es para dos. Yo me conformo con tomar a la serpiente por la boca.-
Y heme aquí, manso y obediente, fustigando los recuerdos que no fueron.
-Las almas se vuelven insoportables como los luceros que un día fueron todo.
Reflexiona un poco justicia, y veras que no hay sendero que sincero te muestre el final,
pues de buenas intenciones corroiste el inicio aceptando el juego del destino para llorarle con reclamos los infortunios de tu miel.-
El sueño hablo, y así me despertó.
El espacio vacío de la cama era la ausencia que ocupó su lugar para siempre pues después de esa noche, desapareció.
Amen.
[Mater dolorosa.]
Fotografía: victoria
NADA QUE DECIR…