Los [santos] inocentes

Junto a ellos, olvidados.
Les prendías una vela,
y me daba la ligera impresión,
que eran lo mas importante para ti.
Tan significativo Jesús,
la Virgen de Guadalupe,
incluso el papa estaba sobre aquel mueble polvoriento,
pero se te olvido que la madera no aguanta traiciones.
Ni siquiera los conoces, no seas ridículo.
Preferiste rezarle a la figurita de plástico de colores
y a la foto en blanco y negro de Jimi Hendrix,
la cual por cierto se sostiene a si misma,
que a nosotros animales heridos.
Si no pudiste con todo eso,
menos contigo mismo.
Esa presión que ejercías con los ojos tenia una amarga capacidad
de helar esa única habitación que te pertenecía,
se volvía presente, insoportable.
Vete de aquí. ¡Espera! se te olvidaron tus santos.
Me pregunto cuanto tiempo más podrás vivir sin ellos.

Fotografía: Kevin James Neal