Me mantengo en un estado de contemplación,
donde no siento nada. Ni el fuego ni la lluvia.
Todo a mi alrededor pasa lentamente,
sin que me interese, solo observo.
Aquí no pasa el tiempo.
El exterior está sobre valorado.
Todo el mundo se pasea como modelo de referencia,
cumpliendo reglas para tratar de disimular su naturaleza.
No puedo con eso…
Fotografía: Gediminas Jankevicius