Abrazo de luna

En las horas extrañas de noches fugaces y días claros es cuando más te pienso, te me vienes a mi mente con una fuerza intempestiva, queriendo seducir cada milímetro de mi ser, te pareces a un atardecer que está en llamas, que el cielo no quiere dejar ir. Me gustaría llevarte al mar, a la montaña, a los lugares más recónditos del planeta, yo contigo lo quiero todo. Me sabes a poesía, a lluvia en el café y vino carmenere que se mezcla con la espuma efervescente de besos y caricias que siempre nos damos cada vez que nos cruzamos. Sos tan diferente a los demás, tu calma aliviana mi alma, esa sonrisa tuya despierta sensaciones escondidas, esos rayos de luz tan cálidos que emana tu esencia y que llegan hasta mí. Te pienso y siento que puedes escucharme.

Fotografía por Michel Nguie