Tal vez encuentres extraño leer esto. Quizás, hasta cierto punto, te encuentres confundida porque realmente no es algo que alguno viera venir o, si ambos en algún momento lo supimos, fue preferible dejarlo así, no sé…
Después de verte casi todos los días, en la mayoría de clases, sentados juntos para no aburrirnos, ser fantasmas para los demás y platicar entre nosotros… hoy extraño eso. Compartir un cigarro después de desayunar y platicar de todo, esos instantes hasta ahora han sido el mejor regalo que me has dado y por cursi que suene, te extraño.
Sé que hemos tenido acuerdos y diferencias, como todos. Sin embargo, nunca me cansaría de eso, dado que siempre me has hecho aprender de las cosas y has sido mi fuerte en varias ocasiones. Hasta que llegó el día en el que te empecé a pensar más. De repente estabas en mi cabeza, llegado sin aviso… sencillamente entraste.
¿Me odias si te digo que me gustas?
Desde que te conocí siempre he reconocido que eres alguien muy inteligente, con carácter y que, sobre todo, destaca y comparte su opinión. Nunca te quedas con algo. Me declaro fan y afortunado, tuve la buena fortuna de coincidir contigo, y volverme alguien para ti, más allá de ser sólo un compañero de clase.
Suena increíble, pero debo decirlo, en ti veo todo lo que me gusta de alguien y tardé en aceptarlo porque temía que fuera algo efímero; pero creo que de miedo no se vive.
Se siente un vacío repentino, de verte cinco días semana con semana, ahora te veo cada vez menos, tienen que pasar meses. Eso realmente ha sido complejo… y me hace odiar más la situación pandémica que vivimos.
Ahora cada que te vea quiero aprovechar cada minuto porque ya no sé cuánto tiempo deba pasar para volver a verte a los ojos, para contarte lo que ha sido y lo que no, pero, sobre todo, para escucharte y admirar la bella persona que eres.
DIRT
Fotografía por Katya Mamadjanian.
lost in the void-
IG: @suarezzbenjamin