Cálido trayecto.
Pasando del invierno al calor con el objetivo de calmar la ansiedad.
Todo se transforma en olas positivas con la luz cálida y las palmeras.
Mar volcánico es el remedio, la pastilla amarga que nos libera del miedo.
Camino a nuevas memorias, templando… las emociones.
Välke.
Esa época del año, cuando los días de sol duran más de 16 horas,
los rayos se reflejan de diferentes formas durante más tiempo.
Laponia y su extraño silencio nocturno.
El resplandor, lo diferente, llama la atención.
Olas al óleo.
Alejándonos sin las latas de aerosol,
graffitis en la ciudad.
2 mochilas, 2 skates y un penoso intento de pintura.
Una mezcla de matices conservadores con un poco de vida,
de calle y el mar del norte.
Syöte.
Biológicamente este cuerpo caribeño no es capaz de sacar las manos de los guantes para tocar la cámara de metal helado.
Poca luz, 3 máximo 4 horas, …congelado… y un halo cálido accidental.
Cala sin censura.
Magia, sensación de felicidad y una pelea en el agua.
¡Vivan las playas para perros!
Aquí no pasan a reprimir a nadie.
A disfrutar del agua sin censura.
Hola soy Debbie Marentes y nací en Mérida Yucatán, pero crecí en Guadalajara. Tomo fotos en cámara analógica desde hace 17 años. Pase por las escuelas de arte en Madrid y Barcelona. Ahora trabajo de diseñadora grafía en una tienda muy bonita en Barcelona, Casa Perris. Tanto en diseño y pintura como en fotografía prefiero los colores suaves, las fotos con tonos claros, las luces altas y los reflejos naturales. Imágenes más limpias que reconforten. Composiciones minimalistas pero orgánicas, ordenadas. En la fotografía encuentro un espacio donde trasmitir historias y preferencias estéticas diferentes al diseño y la pintura de carteles, que a veces no me permiten esa libertad de expresión. Mi hobby es el deporte; skateborading, bailar y correr distancias largas. ¡También hago pintura de señales a sus órdenes! Me gusta mucho lo urbano, la calle y salir con mi banita, pero la naturaleza es mi inspiración y donde encuentro fuerza para seguir adelante.