Vas a morir en tres horas con el rostro que tienes hoy

Siendo de las mañanas más terribles, no sentía ni la cara y sentía que moría. Por ahora pago el precio del caos, sin la destrucción y sin tener algún origen. Las mañanas siguientes a esto, son las sesiones recordatorias bajo una insistencia de jamás volver a estar en situaciones como estas -innecesarias- y conflictivas, tratando siempre de sobrevivir.

Pareciera que a veces mi propia mente crea conspiraciones que se vuelven actos terroristas, se llenan de falsos y crean el enemigo común, que soy yo. Ahora sé que ese es el truco, nunca quedarse con el invento. Por ahora, abandoné cualquier expresión y experiencia emocional, y preferí darle sentido a toda la confusión existencial para llegar al contrapunto y alcanzar la armonía pretendida, era la única manera de salir de una depresión inducida.

Estamos marcados para siempre con un vacío, marcados por la influencia de esos falsos y enemigos comunes que tienen nuestros nombres, por funerales que jamás fueron asistidos. A pesar de todo, cualquier pérdida te lleva a conceptos atípicos.

En qué puntos quieres que pase el tiempo ¿Qué te dé la hora o las líneas de tus experiencias en lo incorrecto? ¿Qué es la existencia sin la carga de infraestructura instintiva que nos lleva en sentido de acciones inciertas? Sí, quería las líneas y no, la existencia no es nada sin lo incierto, por lo que pretendía no odiarme y también pretendía algunas verdades construidas para sostenerme. Iba en inercia a la nada, en una continua misión a -no sé dónde- con sentimientos fijos que no necesitaban congruencia dentro de la realidad, solo una constante.

La misma naturaleza tiene un sentido en el cual se mantiene en un cambio continuo, todo ese orden mantiene de igual forma un desorden, y así me sentía. Iba del paraíso a una fosa séptica, levantándome por días, durmiendo por años. Tengo un interludio de decisiones y probables arrepentimientos, de autoengaños y desplaceres que van de la mano a una paradoja de -ética y existencia- por lo que lo he llevado de cierta forma a ser una estética de la existencia. Y esa muerte y esa mañana, ya estuvieron aquí.

Fotografia por ecka’s echo