los estúpidos son espontáneos impredecibles sensuales y divertidos
ese es charlie kaufman sus ojos rojos tan rojos como un rábano
1968 el año de su resurrección su nariz morada y su voz ronca con su estúpido dron
le gustaba pensar que un dron nos espió por la ventana filmándonos mientras
follábamos una y otra vez por mi cocina haciendo capítulos de eso
charlie es un tipo sin precio y de tenerlo no podrías pagarlo sus tetas eran
como dos cuchillos despiadados sedientos de sinceridad y llenos de peligro un semental con una psique despiadada y superior
si me preguntas si quise a charlie te voy a decir con mi cara enrojecida que sí lo ame tanto como a una inyección de adrenalina
Fotografía por Thomas Listl
Hago experiencias para desconocidos y así volvernos los mejores desconocidos.