Sepultando amor en un cementerio municipal

No supe que hacer cuando el internet se fue, escribí una carta y te busque. Entre lluvia y deshonra mire tu ventana desde la calle pero no deje la carta. Las acciones reales son más duras.

Regresando a casa, observando la ciudad como si el agua fuera fuego, todos ardían un poco en su interior, más de mil mensajes contenían un perdón en sus celular ese 23 de octubre. En casa no cerré ninguna pestaña del ordenador, había tutoriales de inteligencia emocional y una comedia romántica en procesó. ¿Que hago ahora? Me pregunte, cuando llegó tu mensaje aclarando no volver jamás. Bien, es el final que merecía, lastima que el Ctrl + X no existe para el corazón.

Vivir para lastimar a lo que más quiero, lo que más quiero es que te vayas a vivir lejos o conmigo

– Yo Mate A Tu Perro