Quizás mañana
los arboles sean más verdes
y las flores más hermosas,
el amanecer más rosado
y más tranquila la penumbra nocturna.
Quizás
todos los pájaros desfilen en el cielo y todos canten para ti.
Quizás mañana
la piel te amanezca más suave y más irresistible tu beso,
más delicado tu hablar y más firme tu carácter.
Quizás
tus ojos miel me derritan más que ayer.
Tu sonrisa me soborne el sentir.
Quizás mañana sea el polo opuesto.
Quizás mañana
tu voz me irrite los oídos
y carezcas de simpatía,
me aburra tu manera de bailar
y no me queme el encanto de tu tocar.
Quizá
lo que tenemos se quebrante parte por parte;
nos hagamos mal día a día en vez de bien.
Evitemos vernos y que desaparezcas de mi andar.
Pero, también,
quizás mañana
no pueda pensar en otro abrazo, otra mirada profunda, otro olor, otro amor, otro cuento por vivir.
Quizá me arranque la piel si duro un día mas sin tenerte aquí.
Quizá seas la parte que sin saber perdí.
Y de regalo el tiempo me hizo encontrarla de nuevo.
La fórmula adecuada puede estar en tu anatomía para embonar perfectamente con la mía.
Quizás te quedes o quizás me dejes.
Quizás hoy te quiero y quizás mañana no.
El mundo se rige por una probabilidad incierta, te trae loco sin saber de que lado agarrarte, en donde apostar todo lo que segundo a segundo te ha costado.
Yo me rijo por el camino de tus pecas y la cicatriz en tu cabeza.
La felicidad que me causa el que entres por mi puerta y de la sensación de perder la noción del tiempo en tus brazos un domingo.
No hay nada en este plano que me asegure un día más de ti, en mi.
Pero, pongo todas mis cartas y vació mi mochila, mis bolsillos y mi fe en que quizás si.
Y si quizás si, que maravilla.
Fotografía por die lehmanns.
Me persigue mi pasión por escribir pero mi mente me bloquea a perseguirlo de vuelta.