¿Cuál es el origen de la canción?
Prefiero Quedarme fue la primera canción que hicimos después de lanzar nuestro EP debut, La Isla Que Somos, en marzo del 2021. Aunque pare ese momento aún no habíamos tocado en vivo, ya estábamos bastante quemados de trabajar con las mismas canciones en el estudio (proceso que por cierto se tardó más de lo debido por el covid) así que estábamos ansiosos y emocionados de pasar la página y hacer cosas nuevas. Prefiero tuvo como base una idea acústica de John, nuestro guitarrista y a veces cantante (en temas como Franco). Él siempre nos pasa mandando notas de voz con ideas de canciones y ésta en particular nos gustó bastante a todos así que decidimos trabajarla. En cuanto a la letra, es una mezcla de ideas de John y yo [Ema]. Él la canta porque así se sintió natural.

¿Cómo fue la sesión de grabación?
Fue bastante especial. Después de grabar el EP teníamos que decidir con quién trabajar la música nueva. Queríamos tener más libertad y posibilidad de explorar. Decidimos entonces hacerlo con Pablo Ocampo, un joven productor costarricense que se ha destacado por su trabajo con bandas que nos gustan mucho, así que sentimos que nos podíamos entender bien con él. Y así fue. La experiencia desde el principio fue increíble. Nos tomamos el tiempo necesario para pre-producir, hacer demos, grabar y re-grabar lo que fuera necesario, probar ideas. Con Pablo sentimos esa libertad y eso nos ayudó mucho para plasmar algo más fiel a lo que teníamos en mente.

¿Cuáles fueron las referencias, influencias o inspiraciones musicales?
John es super fan de Nirvana y eso se nota en casi todo lo que hace. Le gustan bandas como Title Fight que re imaginan esa influencia del grunge y la convierten en algo más. De fijo estaba escuchando algo así cuando hizo la base de Prefiero. Por mi lado, para mis partes de guitarra me inspiré en el estilo de artistas como Starflyer 59, con riffs medio vaqueros y furiosos. Todos casi siempre gravitamos alrededor del shoegaze más pesado y además el hardcore siempre nos jala, así que, aunque claramente esta no es una canción hardcore, de fijo nos influencia. Y es curioso: hasta las canciones que ideamos más dulces y tranquilas, cuando las tocamos en vivo lo hacemos con cierto considerable grado de furia. Casi siempre es inevitable [jaja]. En esta canción en particular creo que dejamos fluir esa energía contenida, lo que dio como resultado una canción bastante tensa y climática.

¿Qué fue lo más disfrutable del proceso de escritura, producción y grabación?
La lindísima sensación de incertidumbre de ver en qué se va convirtiendo la canción.

“Nosotros realmente nunca sabemos qué camino va a tomar cada idea, así que siempre es súper emocionante. Es como plantar una semilla sin saber realmente de qué tipo de planta es”.

¿Cuál fue el mayor obstáculo y cómo se superó?
Afortunadamente el proceso fue bastante fluido y no hubieron mayores obstáculos. Sin embargo, muy al principio, cuando estábamos aún en proceso de escribirla, recuerdo que estuve bastante bloqueado con ideas de riffs de guitarra para el coro, hasta que un día mientras grabábamos una maqueta a John se le ocurrió una línea que finalmente inspiró lo que se escucha ahora. Si debo encontrarle una lección al asunto, sería que cuando estés bloqueado siempre es una gran idea pedirles ayuda a tus compañeros. A veces es así de fácil.

Si hubieran podido invitar a cualquier otra persona a colaborar, ¿quién hubiera sido y por qué?
Nos gusta mucho el trabajo de No Somos Marineros, de México. Hacer algo con ellos sería increíble.

¿Cuál es el mayor reto para presentar esta canción en vivo y cómo se ha resuelto?
Posiblemente Pablo, nuestra baterista, dirá que es mantener el tiempo en una canción tan cansada de tocar, pero afortunadamente él es una máquina y no pierde pero ni un beat y eso nos ayuda enormemente a todos. En realidad esta es una de las canciones que más disfrutamos tocar en vivo. Hay algo en la intensidad de la canción que la hace super divertida de tocar. Nuestra idea al grabar una canción en estudio es que quede lo más parecida posible a como suena en vivo, así que el reto es, más bien, que en estudio suene fiel al sonido en vivo. Para algunas canciones nuevas que hemos estado grabando lo hemos resuelto grabando batería, bajo y la guitarra rítmica en simultaneo. Nos han gustado los resultados.