Han pasado bastantes años y piensas que has cambiado y que yo he cambiado, la realidad es que ni tu has cambiado y ni yo he cambiado. No cambiaremos sólo envejeceremos, nos pudriremos en este inmenso universo, mutaremos en escombros del sosiego, seremos flores, seremos viento y seremos alimento para perros.
Seremos vida y seremos energía, moveremos motores al generar explosiones, congelaremos los picos de las montañas más altas e incendiaremos las mañanas con nuestras miradas lastimadas.
En mi forma de ser no tuviste nada que ver, mis cimientos ya estaban bien asentados cuando te subiste a este barco, no cambiarás ya déjate de engañar, no te mientas y mantente alerta que muy pronto seremos abono de este planeta, observa las estrellas que para allá vamos quizás y nos volvamos a agarrar de las manos o ve contra el viento para jamás cruzarnos.
Seremos hierro y nos oxidaremos, seremos coyotes y le aullaremos a la luna, seremos los peyotes del desierto más bronceado.
Ni tu has cambiado y ni yo he cambiado, no cambiaremos, al final solo vagaremos.
Tropezar en la dirección correcta es la única manera de avanzar.