Aún recuerdo los días tormentosos.
Las llamadas perdidas y los mensajes llenos de ira.
Grandes tormentas que cabían en tres horas y días soleados que duraban semanas.
A veces extraño navegar en esas tormentas, a veces extraño tu voz guiándome en el altamar de nuestros sentimientos.
Al final, el cielo siempre era Azul.
Fotografía por Ama Aura
Mi pasión escribir.
Mi talento fracasar.