La última vez que dijiste te amo no cambió ni tu voz ni tu forma de decirlo, lo que cambió fue el significado.
Esa vez no se escuchó como los te amo que me decías hasta hace dos semanas antes, cuando aún me amabas, cuando no lo decías por compromiso o por lastima. Esa última vez que lo dijiste sonó vacío. Ya no me amabas pero no lo supe hasta un mes después, cuando me rompiste el corazón con la simple frase “ya no quiero estar contigo”. Cinco simples palabras que separadas tenían diferentes significados pero juntas y acomodadas de la forma correcta, tenían todo el poder de destruir a cualquiera. Creo que era algo que ya esperaba, nadie se va así como así de la vida de alguien a quien se ama, tal vez por eso aquel día no me dolió tanto.
Fue entonces cuando tuve que seguir mi vida sin ti, acostumbrándome a la idea de que estarías con alguien más. Y me costó, pero eventualmente todo pasa. Después quisiste volver a mi vida, el problema fue que tardaste mucho o tal vez yo te superé muy rápido.
Fotografía por cem celik
