Entrevista a Carla Rivarola
por Abel Ibáñez G.
¿Cómo fue cambiando la canción, desde se empezó a escribir hasta que quedó grabada?
Cambió muchísimo. La idea original de la guitarra y la melodía del verso estaban desde el principio, pero me tardé mucho tiempo en encontrar el coro y en trabajar la letra. Hubo muchas versiones de la composición pero ya que llegué a la forma final de la rola, el arreglo fluyó con mucha naturalidad y lo montamos en muy pocos ensayos.
¿Quiénes colaboraron en el proceso de escritura, música, letras, producción, ejecución, grabación, mezcla, etc.?
La canción es mía, también tengo la responsabilidad de la producción y la dirección musical en este disco. Tengo suerte de estar con un team muy hermoso con quienes montamos el arreglo, Azael González en batería y Karin Negrete (Antagónico) en el bass. La mezcla es de Lucas Rossetto, que también está a cargo del tracking de baterías.
¿En dónde fue grabada esta canción y cuánto tiempo duró la grabación?
En Marea Estudio, CDMX, todo lo grabamos una misma mañana menos la voz que la grabé en casa de Lucas el día que empezamos la mezcla.
¿Cuáles fueron algunas otras opciones para el título de la canción y por qué al final se escogió esa?
El título casi siempre es lo último para mí. Pasó por varios como “Escandón 2017” y “Duro”. “La Gravedad” siento que encierra mejor todo el sentido de la canción.
¿En qué está inspirada la letra? ¿Se buscaba expresar algo concreto con la letra o la idea es dejar que quien la escucha le dé su propia interpretación?
Un poco de las dos, pienso que las mejores canciones son las que tienen muchas lecturas. Para mí, esta canción trata de un sentimiento de resistirse al cambio y aferrarse, y creo que puede aplicar para muchas situaciones diferentes. Siempre es chido ver cómo la interpreta alguien más.
¿Hubo algo de manera consciente que pueda considerarse como una influencia o una inspiración dentro del proceso de escribir y grabar esta canción?
Esta rola toma mucho de mi lado argentino, quería que fuera un sonido potente pero transparente como el de las bandas de la Plata, que es la escuela de la que vienen Lucas (mix) y Peta (máster) entonces fue bastante orgánico. También la historia me hace pensar en la serie de The End of the Fucking World.
¿Cuál fue el mayor obstáculo para la realización de esta canción?
Tomar las decisiones pensando en el contexto de su lugar en el disco, siento la primera que grabamos.
¿Cuál fue el mayor aprendizaje durante el proceso de escribir y grabar esta canción?
No pongas fecha de estreno hasta que esté listo todo.
Si hubieras podido invitar a cualquier otra persona a colaborar en esta canción, en cualquier parte del proceso, ¿quién hubiera sido y por qué?
¡Estoy justo con quien quiero estar! Si fuera muy importante para la canción invitar a cierta persona me hubiera armado de valor para no guardármelo, no hay simulacros.
Si pudieran grabar otra versión de esta misma canción, ¿cómo sería esa canción? ¿Qué parte del proceso harías o encararías de manera distinta?
Me gusta mucho la versión acústica que hice para el Marvin Gateway, es triste y reverbosa y nunca explota, le da otro nivel de dolor a la canción. Me gustaría mucho grabarla así, creo que no le cambiaría nada a cómo quedó.
¿Cuál fue, es o será el mayor reto para presentar esta canción en vivo con la alineación actual del proyecto? ¿Y cómo se ha resuelto o piensas que puede resolverse este reto?
Lo que más amo es que la rola es literal solo mi banda tocando, estamos impresos nosotros, ¡y es justo lo que quería! Creo que la carga mayor la tiene Frenk, que tiene que estar cambiando entre guitarra y teclado toda la rola, pero se rifa. Como tal todo el planteamiento del disco es que no haya cosas que no podemos tocar en vivo 4 personas.
compositora / productora / contradicción