La angustia

La siento correr por mi espalda, cuando cae la tarde y el timbre no suena, con los correos electrónicos que no llegan.

A veces siento que nací para esperar, para escuchar promesas de un mejor futuro, sueño con la llegada del mañana.

Después de tanta espera de los días y los años esta silla junto a la ventana se ha vuelto mi verdadero hogar.

Fotografía por callaveron