El inicio de la revolución

Creo que realmente no estaba lista, debía entender que los problemas no se evitan con bowls de popcorns ni leche chocolatada, y mucho menos viendo sex and the City hasta la madrugada. 

Creí estar lista, pero no fue así, no lo vi hasta ahora, tal vez todo lo anterior, los últimos años de llantos y crisis existenciales frente a la tele y una bolsa de papas, solo me ayudarían a ganar 5 kilos. Tal vez la odisea a penas empieza, tal vez todo este tiempo solo fue el preámbulo de mi revolución interna y  es justo ahora empiezo a conocerme, las piezas del rompecabezas están apareciendo y poco a poco comienzo a construirme. 

Si bien no sé  aún lo que quiero, cariño al menos sé lo que NO quiero, y eso es un punto de partida. 

Reconozco que estoy perdida en mi propio laberinto, y que aunque maravillosas personas están a mi lado, este es un camino que debo realizar yo sola, y que así es como quiero hacerlo. Me extraño a mí misma, lo que sabia de mí, el tiempo que debo invertir en mí otra vez.

Podría darme a mí misma un speech motivacional o un amiga date cuenta sobre todo lo que ha sucedido pero sé que no funcionaria, nunca funciona si no hay voluntad, si no hay acción equivalente. Pero por primera vez en mucho tiempo siento que ya no estoy esperando encontrar el camino correcto, lo estoy haciendo, simplemente me avente del parapente y estoy jugando a ver a donde me lleva el viento, y hasta ahora parece lo correcto, ya no estoy sentada admirando el mundo que tengo de frente, estoy en el, volando, sintiendo que lo estoy intentando. Se que voy a caer, una y mil veces, tal vez en el mismo hoyo, pero tengo la certeza que no permaneceré ahí, soy un transeúnte, nómada, vagabundo, no puedo permanecer quieta y eso es con certeza lo único que sé de mí, estar en constante movimiento y transformación es lo que me incentiva.

Siempre me sentí pasiva, tímida, naive, siempre busque de todos modos una manera de revelarme, de revolución, escribí mas de 20 diarios, leí más de 100 libros, vi películas en el cine y en casa sola, viaje a países fuera y dentro de mi continente, fotografié rincones de Italia, Holanda, Sudamérica, Marruecos, mi ciudad, mi vecindario, mi casa. Me mude a otro país en busca de respuestas y solo llegue preguntándome cosas que nunca lo había hecho. Tal vez solo buscaba formas de que mi yo saliera a la superficie, tal vez son los pequeños actos de valentía y rebeldía los que nos enseñan quienes somos y para qué nacimos. 

Tal vez solo tal vez la vida consta en encontrarlos. 

Fotografía por Marc Gassó