Entrevista a John Galilea
por Abel Ibáñez G.

¿Quiénes colaboraron en el proceso de escritura, música, letras, producción, ejecución, grabación, mezcla, etc.?
En primer lugar, la letra, melodía y música fue escrita por mí, si bien conté con la colaboración de Luis de Oleza en el aspecto musical, dejando su sella de identidad en el riff tan idéntico de la canción. Posteriormente, en la grabación igualmente se unieron el resto de miembros de la banda, Jaeson Peña (bajo) y Miguel Sánchez (batería), y contamos con la colaboración de Oscar Moreno aka Ojo como piloto de naves en la grabación, producción, mezcla y master. Si bien la grabación fue realizada en Mayo de 2021, la canción continúa su propio ser y ha sufrido ciertas variaciones de cara a su interpretación en directo, convirtiéndose en un tema más noventero y potente. Esto se ha producido gracias a Diego Cendra, actual guitarrista de la banda.

¿Cómo fue cambiando la canción durante el proceso de producción y grabación?
La canción inicialmente surgió como una balada, una melodía que no dejaba de sonar en mi cabeza y se repetía en modo mantra, de ahí el inicio de la letra “esta voz que suena en mi cabeza … y no se apaga”. Posteriormente en los ensayos previos a las grabaciones consideramos darle más ritmo y hacerla más rápida, esto posibilitó que la producción adquiriera un mayor peso, incluyendo varias guitarras, acoples, sintetizadores, etc. Sin duda, Ojo nos posibilitó a hacer el tema más cañero.

¿Qué fue divertido, interesante, extraño o intenso que haya ocurrido durante las sesiones de grabación?
Fue una experiencia memorable. Estuvimos grabando día y noche durante varios días en el Purgatorio en el barrio de Usera en Madrid, fueron muchas horas de experimentación y evasión social. Considero que hay un claro poso de todo ello en el material que grabamos. El resto, quedará para el recuerdo de nuestras propias vivencias.

¿Cuál es la historia detrás de la letra de la canción?
No es más que un domingo en casa tras haber exprimido al máximo el día anterior. Levantarse y sentirse vacío. Empezar a darle vueltas a la cabeza, pensando en nuevos sucesos, nuevas formas por venir. No es otra que soñar, soñar despierto como algunos llaman. Y al final, dejar de pensar y empezar a fluir dentro de ese estado de aletargamiento.

¿Hubieron influencias o referencias musicales que funcionaron durante el proceso de escribir o grabar esta canción?
Por supuesto. Como cualquier ser en este mundo, me voy haciendo de todo lo que está alrededor. En este sentido, musicalmente me considero un gran oyente y pueden notarse ápices de influencias muy variadas en nuestra música. En esta canción, pensé en muchas melodías de Galaxie 500, en concreto del On Fire –recordamos que inicialmente el tema era mucho más lento. Recuerdo que el modo mantra de la canción también tuvo su origen en una banda de unos amigos de Pamplona llamada Exnovios que, si no conocen, la recomiendo. La canción se llama Buscando un Hogar y es un viaje ciertamente desesperado, tratando de buscar una nueva ilusión. Amor Droga es el disco del que forma parte ese tema y fue tal la conexión con el productor de la grabación, que le pedí a mi amigo Juan (voz principal) que me mandase una copia del LP para regalársela a Ojo.

Finalmente, cuando buscamos la energía para hacerla más rápida y llevarla a su visión más cañera, recuerdo comentar con Luis “Feel the Pain” de Dinosaur Jr, donde nuevamente, la temática de la canción resultaba ciertamente poco esperanzadora… Si quieren saber más sobre ella, no les queda otra que venir a vernos en directo.

¿Cuál fue el mayor obstáculo durante la escritura y grabación de esta canción y cómo se superó?
Creo que esta pregunta debería responderla Miguel ya que la grabación de la batería resultó ciertamente intensa para su persona. Estaba lesionado de la rodilla y mi mente ha borrado el número de tomas que llegó a necesitar.

¿Cuál fue el mayor aprendizaje durante el proceso de escribir y grabar esta canción?
Estar abierto a cualquier tipo de cambio. A veces las canciones nos las imaginamos de una forma y olvidamos que adquieren su propio devenir.

¿En esta canción hiciste algo totalmente distinto a lo que normalmente haces para otras canciones?
Diría que no. La canción fue escrita con mi guitarra acústica, buscando una melodía sobre la misma y escribiendo la letra en papeles que trato de no perder. Es un proceso muy artesanal y la mayoría de mis canciones comienzan así.

Si hubieras podido invitar a cualquier otra persona a colaborar en esta canción, en cualquier parte del proceso, ¿quién hubiera sido y por qué?
Me hubiera gustado que Diego, nuestro actual guitarrista, hubiese aparecido en nuestro viaje antes de la grabación. Aunque realmente apareció durante la mezcla gracias a Ojo.

Si grabaran otra versión de esta misma canción, ¿cómo sería? ¿Qué parte del proceso harías o encararías de manera distinta?
Probablemente reanimaríamos un poco más el sintetizador que está enterrado al final de la canción. Además, seguro que grabándola de nuevo se podría apreciar una nueva energía en la interpretación de la canción que sí que se está notando en los directos.

¿Cuál fue el mayor reto para presentar esta canción en vivo y cómo se ha resuelto?
Probablemente transmitir la energía necesaria que el tema requiere a su interpretación en directo.

En una playlist, ¿qué canción de otra banda pondrías después de esta?
Buscando un Hogar de Exnovios.