La belleza que irradias, perfecta luz … sueños en mis ojos.
Quedé atrapado en cada rincón de tu sonrisa sin querer huir.
Cada ondulación de tu cabello cae sobre tus hombros con cada ademán.
Como admirar trazos sobre un cuadro, símbolo de mi idolatría.

Arde mi corazón, lo llenas de paz con cada palabra santa.
Tan inalcanzable, tan autentica, tan diáfana, tan tú.
La luz en mis grietas, como un crepúsculo dentro del caos.
Eres la píldora que cura el dolor, eres vida y energía… eres catarsis.

Antes de conciliar el sueño dedico a ti mis mejores versos,
haciendo cuenta de todas las sonrisas que me has robado.
Cada palabra que emana del fondo de tu corazón embelesa,
Y más que tus palabras es tu manera de fluir, y lo turbio acaba.

Tus ojos, cual arte para los míos que me da miedo mirarte,
mirarte y seguir sin saber si hay regreso de ese etéreo paraíso.
Lees mis pensamientos sin que hable y ninguno es digno de describirte,
mereces más que poesía, pero haría poesía sólo por verte sonreír.

Y anhelo el día que me digas “mañana nos vemos”,
Sería la mejor cita que pueda recordar.

Algún día…
Poder darte un beso en la frente y decirte “hasta mañana”.

Fotografía por Jocelyn Catterson