Carta abierta a los viajeros daltónicos

Caminante, que ahora andas para huir de ese pasado que tanto te atormenta, ahora hay que cambiar de piel.

A donde quiera que vayas, la plegaria del ‘aquí y ahora’ no es suficiente si no eres consecuente.

Purificar los pasos requiere mucho más que enterrar los vestigios del pasado.

Irse lejos es fácil cuando caminamos para dejar atrás una vida que edificamos pero no resistimos.

Sin embargo, aunque recorras el mundo con el corazón hinchado de dicha por llegar lejos, siempre tendrás que volver a ti mismo.

Fotografía: Clothilde Pasquier