Hablar de mi no es algo que hago con frecuencia, hace mucho no me resulta sencillo, hace mucho no hablo con nadie aunque hablo con todos. Hace tanto no río con ganas y no lloro ni queriendo hacerlo. No sufro de insomnio y mis mañanas son repetitivas. Todo esto es nuevo para mi.
Agunos dias me ahogo y mi mente queda como humo entre pulmones y dias como hoy que estoy a flote, como surfeando en las aguas de la mentira en mi tabla de la verdad. Como meciendome en el columpio de la conciencia, como viajando en una nube de asfalto. Ahí entre lo real y lo sub-real, ahí estoy. Sola.
“Algunos días necesito amor.
Algunos días necesito sexo.
Algunos dias sólo me echo a contemplar mi radiante belleza.
Algunos días no necesito una mierda de nadie.
Algunos días quiero salvar al mundo.
Algunos días no puedo hacer nada más que verlo arder.
Algunos días me siento tan viva.
Algunos días, apenas sobrevivo.”
A menudo ignoro los temas de conversacion referente a mi vida. Me he vuelto experta en hacer silencio en la mente, no es tan sencillo hacerlo como decirlo, es mas sencillo escribirlo que describirlo pero es como dividir la mente en dos; una parte que está intentando dominar -un perro por encima del otro- y matar la otra parte, lo cual es absurdo. Es un juego tonto. Puede llevarte a la muerte.
No puedo dejar de observarlo todo, esa capacidad es mas grande y mas profunda cada vez, los huecos y la conciencia comienzan a elevarse. Algunos pensamientos se van, otros no aparecen.
Algunos dias lo retengo todo y decido usar la mente como piernas donde corro tan rápido y voy tan lejos como pueda, las pongo en descanso y las piernas siguen ahí.
Hace pocos dias un amigo me aconsejó escribir al darse cuenta lo dificil que estaba siendo para mi tratar de expresarme, le dije que no seria sencillo, que sería como echarle leña al fuego, sal a la herida, un bocado de mi propia mierda existencial. Y heme aqui riendome de todo lo que no he dicho porque no lo necesito. La perspectiva de aquellos dias estaba siendo afectada, nublada, reprimida por la sensación de soledad y hoy aunque sola, conmigo. Hoy me dedicaré canciones de amor. Afilaré mis uñas un poco más, iré a la peluquería a ser mas bella para mi, haré de cuenta que todos están muertos y que no fuí a sus funerales porque no me gusta fingir. Tendré una cita conmigo y me diré cuanto me amo mientras me beso frente al espejo. Hoy es un buen dia para volar, hoy es un buen dia para morir, es un buen dia para detenerlo todo. Es un buen dia para decirle al cosmo que se incline ante mi. Puedo decir que es un buen dia para estar en lo alto.
Fotografía: Michelle Owen
Divina intervención