¿Cuál es el origen de la canción?
“Altar” es una canción que nació a partir de una crisis, durante un momento muy difícil por el cual atravesaba y la única manera de sanar fue escribiendo todo lo que sentí. Tomé la guitarra y empecé a tocar y escribir. “Altar” habla del amor más profundo que existe, el amor hacia nuestros padres, hijxs, a una nueva vida que viene en camino, a la familia, amigxs, a nuestras parejas, nuestras raíces, de dónde somos y quiénes somos. Es un tributo a todo lo que nos hace ser nosotros. Es una canción muy significativa ya que naturalmente logra transmitir gran parte de mi ser, historia e influencias musicales.

¿Cómo fue la sesión de grabación?
Fue algo único, muy mágico y especial, yo creo que por la carga emocional y energía que naturalmente trae la canción. Desde su composición fue como un mantra que se apoderaba de mí y me decía el camino, me invitaba a descubrir quién soy y lo que me quería decir estar pieza. La grabación no fue la excepción y eran como estos rituales de búsqueda e inspiración, de recuerdos, guiados por la misma canción hasta que concluimos. “Altar” fue grabada y producida en NNR (Norteamérica Nacional Recordings) en la Ciudad de México por Uriel Herrera y ochocuatronueve. El mix fue a cargo de Seiji Hino y el Master por Kb de Testa Estudio.

¿Cuáles fueron las referencias, influencias o inspiraciones musicales?
Al principio no existían influencias o inspiraciones ya que fue una canción que nació sin ningún objetivo, solo expresar los sentimientos. Posteriormente pude analizar y leer influencias que van desde Frank Sinatra, José José, Dean Martin, Noah Georgeson por mencionar algunos.

¿Qué es lo que más te gusta de la canción y por qué?
Todo lo que descubrí al hacer está canción, conocí mucho de mí, de mis influencias, de quién soy y qué quiero ser. “Altar” es la puerta al descubrimiento de este alter ego musical que estoy trabajando.

¿Qué fue lo más disfrutable del proceso de escritura, producción y grabación?
Lo más disfrutable e increíble fue el ver ya materializada esta canción, todas estas emociones e historias aterrizadas en la pieza final. La magia dentro de su desarrollo, siempre fluyendo con la escencia de la canción junto a los productores, ahora amigos que tanto admiro.

¿Cuál fue la parte más difícil del proceso y cómo se superó?
La parte más difícil para mí fue el proceso de escritura ya que fueron momentos muy duros que finalmente nadie podemos controlar. Sentimientos que al escribirlos y expresarlos se transforman en tesoros y oportunidades hacia lo que sigue y lo que viene.

Si hubieras podido invitar a cualquier otra persona a colaborar, ¿quién hubiera sido y por qué?
Habíamos tripeado esto en algún momento y pensamos al aire en colaboraciones cómo Pehuenche, Madame Recamier o Marcol. Por la inspiración que nos traen como artistas y porque me identifico musicalmente.

¿Cuál es el mayor reto para presentar esta canción en vivo y cómo se ha resuelto?
El mayor reto de presentarla en vivo es un arreglo de cuerdas y su orquestación no convencional que hemos resuelto con la famosísima secuencia.

Recomiéndanos alguna canción que hayas escuchado ultimamente y que te guste.
Noah Georgeson – Find Shelter.